Un desayuno con encanto en el Café Azul. Ese es el lema elegido por este típico establecimiento de Tarifa para dar comienzo a una jornada en la que es seguro necesitarás un mayor aporte de energía. Olvídate de los churros o del pan con manteca. Hay otras formas de desayunar.
Texto y fotos por ©José Manuel Beltrán.
Allá por el verano del 98, en una de las principales y más comerciales calles de Tarifa, la de Batalla del Salado, una pareja de berlineses, Inga María y Henry, deciden instalarse en un pequeño local. Aportando una gran ilusión su proyecto era muy simple: conseguir, algo si cabe inédito por aquellos tiempos, una manera diferente de desayunar en Tarifa. En definitiva, crear un desayuno donde se garantizase unos platos de calidad en un ambiente especial y acogedor. Así nace «Un desayuno con encanto en el Café Azul».
La semilla estaba sembrada y hasta 2004, sus frutos fueron los de una clientela fiel, curiosa, no muy madrugadora para desayunar, es cierto, pero que se sentía cómoda con un desayuno contundente y saludable. Durante dos años, hasta el 2006, Jorge y Pepe, tarifeños de cuna, se pusieron al mando del «Azul» continuando con la misma línea de negocio. El espíritu del desayuno continuaba.
El clásico mensaje del Café Azul: un desayuno con encanto.
Y a partir de ese 2.006, cuando ya desayunar en el Azul se había convertido casi en un mito, es de nuevo una pareja, la formada por los italianos Fiorenza y Marco, quienes asumen la responsabilidad del negocio. Han transcurrido doce años y se puede decir que han superado las expectativas de una clientela ya muy acostumbrada a las delicias del lugar.
En Tarifa, por lo general, no se madruga. Y cuando hablo de madrugar me refiero a ese vicio de levantarse temprano para desayunar. La culpa de ello la tiene .... ¡bueno, tampoco se trata de ir buscando culpables!. El caso es que, si uno se ha acostado tarde, es legítimo levantarse más tarde. Al fin y al cabo la playa, el viento y cualquiera de sus atractivos diurnos están ahí; no se van a marchar.
La clientela del Café Azul lo sabe, ¡bueno también lo saben sus propietarios! y por eso el horario de apertura del establecimiento es a la temprana hora de las 9 de la mañana, eso sí todos los días del año. Sea porque muchos coincidan a la misma hora; sea también porque el espacio es en ocasiones reducido (y eso a pesar de la ampliación del local) el hecho es que conviene no retardarse mucho.
Personalmente me encanta la decoración del local. Por un lado podríamos decir que lo es en plan "retro"; por otro en "vintage". Por supuesto, haciendo honor a su nombre los tonos azulados no podían faltar.
Es al fondo, en lo que pudiera haber sido un pequeño patio, donde el blanco de sus paredes encaladas hace juego con los adornos de mesa en azul junto a las plantas naturales. Es este, al igual que los del resto del establecimiento, un espacio para compartir.
En la nueva ampliación, las mesas igual que las sillas, no están sometidas a una armonía unitaria. Son diferentes, sí, pero formando un conjunto. Un conjunto decorativo, junto a unas lámparas e iluminación que te hacen estar a gusto; en un lugar con encanto; un lugar también para desayunar en familia.
Aún así hay algo importante que debes saber y en ningún caso importunarte. En alguna ocasión, si no existen mesas individuales libres, es posible que amablemente se te solicite compartir mesa con otros clientes. Es el caso que, si las mesas grandes generalmente de uso para familias o grupos no se llenasen (digamos que ocupada solamente por una pareja) se te pida permiso para compartirla, por ejemplo, con otras dos personas. No se trata de vulnerar tu intimidad con desconocidos, ni mucho menos. Por supuesto si no quieres compartir mesa, no hay problema. Deberás esperar a que otra quede libre.
Y ya en el apartado culinario decir que el menú es amplio. Todo se realiza en el momento; con productos frescos y de calidad. Ahh, antes que se me olvide: existe pan SIN GLUTEN, tanto para bocadillos, como en los combinados.. Y en el apartado de la leche puedes elegir entre la de vaca, de soja o de avena.
Batidos con yogurt con todas las variedades de fruta que te puedas imaginar (pruébala con yogur y muesli) Zumos naturales, con la naranja o el pomelo como protagonistas.
Bols de fruta fresca, grandes o algo más pequeños, para los niños. Los clásicos sandwiches, algunos tan originales con ensaladilla de atún y queso de oveja. Por supuesto, las clásicas tostadas o croissant con más o menos grasa: me refiero al paté ibérico o al de mozzarella, tomate y albahaca.
Y en un apartado imprescindible, pues es así como en los tiempos del inicio del Café Azul se caracterizó a este desayuno, un contundente plato combinado bien sea, al estilo inglés; al americano, al islandés donde prima el salmón por supuesto; el catalán o andaluz, sin descartar al ibérico. Bien surtido y de calidad para que tu aporte energético sea más que suficiente para el resto del día.
Y el último apartado para este espectacular desayuno lo tenemos con las crêpes. Tanto dulces (donde los críos y no tan críos se les van los ojos) como saladas. En el apartado de dulces yo me inclino por la de kiwi y pulpa de mango; los chavales no apartan sus ojos de las de nutella y dulce de leche. En las saladas, las clásicas de jamón york, queso y combinaciones. Pero un servidor, que le gusta probar aquello menos habitual, se inclina por la de atún y queso de oveja Boffard; la de ensaladilla de atún o la de salmón ahumado, tomate y queso Philadelphia. Si alguna la quieres con un extra de huevo frito... pues sin problema.
El Café Azul en Tarifa se ha convertido en un icono. Un trato cariñoso, amable, siempre con una sonrisa que debe terminar -no olvidemos que su gerencia es de procedencia italiana- con un magnífico café espresso italiano. Una buena forma de desearte a ti mismo "Buenos días".
Junto a Marco, copropietario del Café Azul.
Café Azul. Tarifa.
c/ Batalla del Salado, 8. Tarifa.
Horario: por la mañana de 9,00 a 14,45 horas.
Establecimiento preparado para ciertas intolerancias.
No dispone de página web.
Un desayuno con encanto para disfrutar en el Café Azul. Tarifa.
¿QUÉ TE HA PARECIDO ESTE POST?
Compártelo con tus amigos:
Happy Travel escribió
junio 29, 2018
¡Pero qué hambre nos ha entrado! Nos parece super gracioso lo del vocabulario en inglés y en español… El sitio tiene muy buena pinta, ¡muy acogedor! Y lo de sentarse con desconocidos es un concepto muy de hostel, europeo… ¡Nos gusta! Tendresmos que hacer el esfuerzo e ir a probarlo nosotros que estamos en Cádiz no nos coge muy lejos…;)
José Manuel Beltrán escribió
julio 1, 2018
Seguro que va a ser un esfuerzo agradable…. bueno desde Cádiz, a eso no se le puede llamar esfuerzo ehhh!! Gracias por vuestro comentario.
Jose Lop escribió
julio 9, 2018
El desayuno es la comida más importante del día y en vacaciones está genial desayunar con toda la traquilidad del mundo. Nosotros cuando estamos fuera lo que más echamos de menos es el aceite por las mañanas…
José Manuel Beltrán escribió
julio 9, 2018
Cierto es, José. La verdad es que, ese aceite tan tradicional en nuestra dieta mediterránea, es fácil encontrarlo en muchas partes del mundo. Que sea de calidad… ya es otra cosa. Gracias por tu aportación.