Vamos a recorrer parte del Pallars Sobirá, una de las comarcas más septentrionales de Cataluña, y más en concreto de la provincia de Lleida. Es esta una zona montañosa que cuenta con altas cimas como el Monte Roig, Certescans o Ventolau, numerosos lagos de origen glaciar y populares pistas de esquí, sin olvidar su importante patrimonio románico.
Texto y fotos por ©José Manuel Beltrán.
El Pallars es la cuarta comarca catalana en cuanto a superficie, aunque una de las menos habitadas de toda España. Aquí se encuentra el pico más alto de toda Cataluña, la pica de d’Estats, en el valle Ferrera, con sus 3.143 metros; y también el lago glaciar más grande de todos los Pirineos y al que solo se puede acceder a pie: el de Certescans, en Tavascan.
Mapa detallado de la comarca del Pallars Sobirá con el enclave del Parque Nacional de Agüiestortes.
Mucha suerte tienen los nativos, y también nosotros -los visitantes-, no solo porque en la famosa administración de lotería La Bruixa D’Or, en Sort, se repartieran en dos años seguidos el Gordo de Navidad. Es así que la masiva afluencia de visitantes ha hecho descubrir un entorno de un valor incalculable por su riqueza paisajística y arquitectónica. La comarca conserva el regusto tradicional de los pueblos de los Pirineos, con calles empedradas, tejados de pizarra e importantes muestras de arte medieval y románico.
Desde la capital de la comarca, Sort, podemos visitar dos importantes museos: el de los Pastores del Valle de Assua, en Llesui, y el de las Mariposas, en Pujalt, que es uno de los más importantes de Europa. Pero será en Espot, donde encontraremos una de las llaves que nos dé el acceso al Parque Nacional de Aigüestortes y al precioso lago de Sant Maurici. Allí, todavía, podremos escuchar el canto de los urogallos y el graznido de los quebrantahuesos, dos especies en peligro de extinción.
El paisaje de Les Encantats, con sus dos imponentes agujas, ejerce de sereno guardián al Lago de San Mauricio. Aquí todo es calma. (Pulsar para ver en grande)
La entrada al Parque está prohibida realizarla en coches particulares, por lo tanto es necesario ir con calzado cómodo para recorrerlo a pie. Existe un servicio de jeeps (aconsejable tomarlo) que hace parte del recorrido, sobre todo hasta la maravilla del conjunto de Les Encantants, que hunden sus faldas en las aguas del Lago de Sant Maurici.
La vista del pico de Les Encantats, se erige majestuoso sobre el Lac San Maurici. (Pulsar para ver en pantalla completa)
Cuenta la leyenda de los Encantats que las dos estrechas agujas que podemos ver en su alto son en realidad dos cazadores que no quisieron asistir a la santa misa para ser los primeros en cazar un gran ciervo. Por esta razón quedaron malditos y petrificados para siempre en lo alto del macizo.
Desde allí salen otras rutas a pie, perfectamente señalizadas, o también la posibilidad de poder continuar con el recorrido guiado del jeep. Según el itinerario que elijas disfrutarás con el
mirador del Estany de Sant Maurici, la cascada y el Estany de la Ratera, los Estanys de Amitges, Llong y Redó o el ascenso al Pico del Portarró (2.736 m.); todo ello dominado por otros picos y crestas recortadas. Cada uno de estos paisajes parecen como fotos de postal.
Cualquiera de estos itinerarios los puedes contratar en Espot o en el aparcamiento del Prat de Pierró, a la entrada del Parque.Folleto para descarga en PDF del Parque Nacional d'Aigüestortes i Estany de Sant Maurici. (en catalán)
Los medios de transporte para llegar al Parque Nacional de Aigüestortes.
Varios son los accesos desde donde se puede realizar la entrada al Parque, siendo estos dos los más utilizados: el primero de ellos es desde Boí (Alta Ribagorça) que permite adentrarse en el sector occidental o de Aigüestortes. La segunda puerta de entrada, como a continuación explicaremos, lo es desde Espot (Pallars Sobirà) que es la habitual desde el sector más oriental del Parque: el de la zona de Sant Maurici.
Al sector occidental, o de Aigüestortes, se accede desde el valle de Boí, en la Alta Ribagorça, y cuenta a su vez con dos posibles entradas: por la ribera de Sant Nicolau, que abarca la cuenca alta del río que lleva ese mismo nombre, y da paso a maravillosos paisajes como Aigüestortes o los lagos de Llebreta y Llong; o por la ribera de Caldes, que alberga numerosos lagos como el Travessani, el Negre o el Monges, y picos como el Comaloforno, de 3.033 metros, que es la cota máxima del Parque.
Para llegar a cualquiera de estos dos accesos hay que partir desde Boí. Desde allí, siguiendo la carretera L-500 hacia Caldes de Boí, y a unos dos kilómetros y medio, se encuentra el aparcamiento de la primera de las entradas (la de la Rivera de San Nicolau) y una pista forestal que lleva hacia el Parque. Es seguir por esa misma carretera, y pasado Caldes de Boí, se llega a la segunda de las entradas (la de la rivera de Caldes) situada cerca de la presa de Cavallers, y que también cuenta con parking.
Por esta zona, el acceso al Parque está restringido a partir de los aparcamientos, pudiendo continuar únicamente a pie, en bicicleta o en transporte público (taxis 4×4 con salida en el pueblo de Boí). Tanto las bicicletas como los taxis pueden llegar como máximo hasta el llano de Aigüestortes.
El teleférico es uno de los atractivos del Parque Nacional.
Al sector oriental del Parque, o zona de Sant Maurici, se accede desde el valle del Àneu, y concretamente desde Espot. Desde aquella localidad se puede ir en coche hasta el parking (4 kilómetros) y desde allí continuar a pie, en bicicleta (sólo hasta el lago) o en transporte público (taxis 4×4 con salida en el pueblo de Espot) hasta el refugio de Amitges.
Otro punto de interés desde el que visitar el Parque Nacional de Aigüestortes es el teleférico que permite ascender en menos de un cuarto de hora desde el lago de Sallente hasta el Estany Gento. Al teleférico, que constituye uno de los atractivos turísticos del Palars Jussà, se puede llegar en coche.
Espot, más allá de la entrada al Parque Nacional de Aigüestortes.
Espot, con escasos 300 habitantes, se halla a 1.318 metros de altitud. El río Escriña, que lo cruza, divide el pequeño pueblo en dos barrios muy diferenciados: el de la Obaga y el de la Solana, separados por el río y por su puente románico, el de la Capella. Realmente hay dos puentes románicos, al igual que dos ríos. Aquí, en la misma población, finaliza su recorrido el río Torrassa. Otra joya del románico es su
Iglesia dedicada a Santa Leocadia, del año 839, y con una puerta de estilo barroco. Merece la visita también la
Torre del Moro, de planta circular y 13,5 metros de altura, que data de siglo XI. Muy cerca, no nos podemos olvidar de acercarnos también a
la pequeña localidad de Estais, a 1.445 metros, para adentrarnos en otras dos capillas románicas, la de Sant Ramón y la de la iglesia de Sant Esteve.
Como veis, más allá de la bendita naturaleza estamos en plena ruta del románico mas puro. Ahh, por cierto. Seguro que no os perdéis por Espot pero, por si acaso,
aquí os dejo (en pdf) un mapa de Espot con todas sus peculiaridades.
Vista del puente románico de Espot.
Dejando Espot, bien merece la pena dirigirse a visitar el pequeño núcleo de Son del Pí, que todo él es un Conjunto Monumental de gran atractivo, y subirse al campanario de su iglesia. De regreso a Esterri de Aneu podemos subir hasta Isil y Alós de Isil para contemplar sus templos románicos: la Iglesia de Sant Lliser y la de Sant Joan y visitar su serrería hidraúlica.
Preciosa vista del Lago de Certascan, el mayor de toda Cataluña. Imagen de La Vanguardia.
De vuelta hasta Llavorsí, por la comarcal 13, seguiremos nuestra ruta en dirección a Tavascan, encuadrado en el
Parque Natural del Alto Pirineo. Estamos próximos a la
Pica d’Estats que con su 3.115 m. es el pico más alto de toda Cataluña, y de poder acercarnos al
Lago de Certascan, con una profundidad de 100mts., y también el mayor de Cataluña.
La borda es el nombre dado en los Pirineos a las construcciones para el ganado o para almacenar alimento para los animales. En este caso en Noarre.
Son muchas las excursiones, rutas y senderos que podremos recorrer, perfectamente señalizadas, y de diferentes niveles de dificultad. Nosotros nos inclinamos por conocer las Bordas de Graus y de Noarre siguiendo, a través del bosque, las aguas cristalinas del río Noarre para acceder a paisajes idílicos rodeados de extensos prados. Os invito a todos a descubrir otras rutas, sin prisa y disfrutando de la naturaleza a tope.
Un pequeño remanso del río Noarre donde se aprecian bien sus aguas cristalinas.
No quisiera olvidarme, ya una vez de regreso a Sort –que cómo podéis comprobar fue nuestra base-,
visitar Gerri de la Sal. Aquí encontraréis el Museo de la Sal, el Alfolí y, sobre todo, el Monasterio de Santa María de Guerri, otra preciosidad del románico.
Imagen del Monasterio de Guerri, de estilo románico.
Fuente: Wikimedia Commons.
Camino de Gerri de la Sal o al regreso de la misma, la
parada y la fonda son obligatorias en Can Mariano, en la localidad de Baro. Aquí degustaréis de primera mano de una estupenda cocina tradicional catalana. De la misma forma indicaros que, para pernoctar, elegimos el
Hotel Les Brases, establecimiento de 3 estrellas en Sort, con vistas al río Noguera Pallarés.
Disfrutamos de una contundente cena en Ca Mariano.
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Abril escribió
junio 16, 2011
Que bonito el lago de san mauricio! hace unos años estuve por allí, las montañas llenitas de nieve y el lago congelado, estaba de postal navideña todo aquello 🙂
Pd: Yo fui de las que cogió un jeep para subir jeje la idea de ir andando con el frio que hacía no apetecia demasiado. Pero de una forma u otra el paisaje es espectacular.
José Manuel Beltrán López escribió
junio 16, 2011
Hola Abril,
Llevas razon. Depende de la epoca el frio puede ser mayor. Nosotros lo hicimos en verano y aquello era espectacular. Te sientes en plena naturaleza y la contemplacion del Lago San Mauricio es de pelicula. Realmente toda la zona merece bien ser disfrutada.
Me alegra mucho volver a verte por aqui. Un abrazo, ciudadana viajera.
PD: Perdonad por los acentos pero estoy escribiendo desde USA con un teclado americano y aqui el acento ni le conocen en el teclado.
Nuria Gonzalez escribió
junio 29, 2011
Una maravilla y un entorno único. Mañana mismo volvería.
Besitos ciudadano viajero